Buscar este blog

lunes, 27 de junio de 2011

.

No fue fácil aceptar que me equivoqué, ni tampoco fue fácil aceptar que ya no estaba...
yo también pensé así, que lo importante era eso.
¿Y ahora qué?
Ahora toca preocuparse de lo que me tuve que haber preocupado, ahora toca pararse a mirar si todo fue recíproco.
Si ese humor nos trastocó...si esa manera tuvo algo que ver con mis rarezas...si el calor me hizo llorar, o si fue culpa del tiempo.
Si el intento fue en vano, si todo lo que intenté no las mereció.
Ahora toca preocuparme de ese si, o de nada en concreto y no tiene sentido.
No jugué a nada, hace tiempo que perdí esas ganas...he jugado a no jugar a vuestro juego, a no aceptar las reglas de vuestra fe inquebrantablemente frágil, he jugado a no entender.
Si ser así es lo que buscabas, y hace poco me encontré, no me pidas que sea como al principio si no sabes si engañé.